Salta Planetas es un juego de habilidad en el que debes saltar de un planeta a otro en el momento preciso. Controlas una pequeña nave espacial que orbita alrededor de los planetas y, con un solo toque, puedes impulsarte hacia el siguiente. La clave está en calcular bien el salto para no quedarte a la deriva en el espacio.
Cómo jugar a Salta Planetas
El objetivo es saltar de un planeta a otro sin fallar. La nave orbita automáticamente alrededor del planeta en el que aterrizas, y tú decides cuándo es el momento adecuado para impulsarte hacia el siguiente.
Si calculas mal el salto y te alejas demasiado, perderás la partida. Cada nuevo planeta que alcanzas aumenta tu puntuación, así que trata de encadenar la mayor cantidad de saltos posible.
Fuerza gravitacional y mecánica orbital
Aunque Salta Planetas no es un simulador de física realista, las mecánicas del juego pueden ayudar a comprender de manera intuitiva cómo funciona la gravedad y las órbitas planetarias:
- Órbitas planetarias: La nave gira alrededor de los planetas, mostrando cómo los objetos pueden quedar atrapados en su gravedad.
- Impulso y trayectoria: Para moverte, debes calcular el momento exacto del salto, similar a cómo una nave espacial usa la velocidad y la gravedad para cambiar de órbita.
- Gravedad variable: Si el juego incluye zonas de baja gravedad o planetas con diferentes fuerzas gravitacionales, se puede experimentar cómo estos cambios afectan el movimiento.
¿Salta Planetas ayuda a la ansiedad?
Este juego puede ser útil si buscas una experiencia que te ayude a enfocarte en una tarea concreta y desconectar de pensamientos intrusivos. Su mecánica repetitiva y sencilla puede generar un efecto de “flow”, es decir, un estado de concentración en el que solo importa el siguiente salto.
Lo mejor es probarlo y ver cómo te sientes. Si te ayuda a mantenerte en el presente sin generar frustración, puede ser una buena herramienta para la relajación.
Controles
Ordenador:
- Clic izquierdo = Saltar al siguiente planeta
Pantallas táctiles:
- Pulsar = Saltar al siguiente planeta